Rincón cultural

Huesca es mucho

HUESCA ES MUCHO

Huesca1 

Huesca es mucho y es todo. Tiene las cimas más altas del Pirineo… y es mucho, tiene unos valles de ensueño que han sido moldeados por los cursos de ríos de aguas límpidas… y es mucho, tiene unas gentes acogedoras… y es mucho, tiene una lengua propia en vías de recuperación “La Fabla Aragonesa”, veamos un bonito ejemplo “Me fan goyo tus güellos” (Me gustan tus ojos)… y es mucho y un largo etcétera en todo su territorio.

Pero aunque hoy veremos temas generales dentro de la cultura de Huesca, nos vamos a centrar en el área del pre Pirineo, es decir lo que llamamos la Huesca Medieval, donde el arte y la naturaleza se mezclan como en un crisol de bondades y belleza sin parangón.

Nos vamos a situar en Huesca capital, lugar equidistante a los puntos que vamos a visitar en nuestro recorrido por el Medievo oscense.

Huesca2

Trenza de Huesca

Historia de una ciudad: Huesca (Uesca en fabla) se encuentra en el límite de las sierras exteriores del Pirineo. Desde la ciudad se puede ver la sierra de Guara cuya cima llega a los 2077 m de altitud, y es conocida como "la puerta de los Pirineos".

Historia

Huesca3   Huesca4

Prehistoria

Los primeros asentamientos de la ciudad datan de hace 6000 años donde se encontraron cerámica y sílex de cronología neolítica. También pequeños grupos humanos se asentaron en los alrededores después de la revolución neolítica. Hace 3500-3800 años se documentó la existencia de un poblado o campamento, quizá ya de carácter estable, perteneciente a la Edad del Bronce. Estaba formado por varios fondos de cabañas de planta ovalada, hechas de barro, madera y paja, con abundantes y variados restos de cerámica. Desde el siglo V a.C. hasta el siglo I se encontró la necrópolis más antigua descubierta en Huesca. Estuvo en uso unos 500 años, desde la Edad del Hierro hasta comienzos del imperio romano. Se trataba, como era habitual en este periodo, de un cementerio de incineración, en el que las cenizas del difunto, después de la cremación, se depositaban en pequeñas urnas de cerámica. También se documentaron casas de piedra de planta rectangular y restos cerámicos del siglo V a.C..

   Huesca5    Bolskan en escritura íbera.

Bolskan fue una ciudad celtíbera ubicada en territorio de los ilergetes relacionados con los habitantes de Ilerda, actual Lérida, en el mismo solar que ocupa actualmente la ciudad. El territorio fue ocupado por los suessetanos antes que los romanos. Acuñó abundante moneda, en cuyo anverso aparece el nombre de la ciudad en lengua íbera y un jinete. Durante el siglo II a.C. y el siglo I a.C. fue la ceca que más moneda emitió de toda Hispania.

Edad Antigua

El pretor romano Terencio Varrón hacia 179 a. C., conquistó la ciudad de Bolskan, los romanos respetaron el poblado, si bien se le cambió el nombre por el de Osca. Algunos historiadores creen que el pueblo ibérico era de los ilergetes y para otros al de los suesetanos, así como la lengua era íbera para algunos y eusquérica para otros, siendo la eusquérica una lengua no indoeuropea muy diferente del latín.

La ciudad acuñó bajo dominio romano monedas de plata y bronce con escritura ibérica, en las que su nombre es Bolskan. Son cuatro tipos de moneda: denario de plata y as, semis y cuadrante de bronce. En los anversos figura una cabeza varonil. En el reverso figura, además del nombre de la ciudad, un jinete con lanza, y un caballo alado.

Perteneció a las provincias Citerior, Celtiberia y Tarraconense. Fue elegida como lugar de residencia y centro de operaciones de Quinto Sertorio, quien estableció un senado de 300 miembros y creó la Academia de Latinidad, de la cual se considera descendiente la Universidad Sertoriana de Huesca, la cual fue una de las primeras en España. Quinto Sertorio hizo de Osca la capital de los territorios de Hispania que él dominó durante las guerras civiles de la República Romana, la ceca emitió durante las guerras una gran cantidad de denarios de plata bajo el nombre de Bolskan.

Huesca6 

Denarios romanos de plata oscenses

En el 30 a. C. Osca adquirió la condición privilegiada de municipio romano, con la que todos sus habitantes pasaban a ser ciudadanos romanos de pleno derecho. La ciudad se gobernó desde entonces con dos magistrados anuales, los duunviros. El título oficial del municipio era Vrbs Victrix (en español: Ciudad Victoriosa).

El cristianismo llegó gradualmente a la ciudad entre el siglo I y el siglo IV y en el 258 en Roma, San Lorenzo sufrió el martirio por lo que se declaró patrón de Huesca y entre el año 303 y el año 304 San Vicente también sufrió otro martirio en Valencia por lo que se declaró segundo patrón de la ciudad. En el año 420 Siagrio fue nombrado obispo de Huesca, el primero cristiano que se conoce.

Edad Media

Del Reino visigodo a la Wasqa musulmana

En el 476 con el derrumbamiento del Imperio romano de Occidente Osca pasó a formar parte del reino visigodo y en 598 se hizo un Concilio de los obispos de la provincia Tarraconense. Con los visigodos la ciudad fue erigida como obispado, sufragánea de la Archidiócesis de Tarragona. En 673 el rey visigodo Wamba se hospedó en Osca para sofocar la revuelta del duque Paulo.

Huesca7 

La ciudad fue conquistada por los árabes en el año 719 bajo pacto o capitulación y fue una de las ciudades más septentrionales de Al-Ándalus. El nombre de Osca se transformó a Wasqa y durante los siglos que estuvieron los árabes la sociedad se islamizó, la lengua hablada como escrita fue el árabe donde hay ejemplos cercanos de los nombres de dos ríos cercanos a la ciudad: el Guatizalema y el Alcanadre. Los Banu Salama dominaron las tierras oscenses durante el siglo VII hasta que un grupo de muladíes destruyeron su poder. Los mozárabes se mantuvieron fieles en la iglesia de San Pedro. Se desconoce si en esa época existía una comunidad judía en la ciudad.

En 797 fracasó un primer ataque contra la ciudad, comandado por Luis, el hijo de Carlomagno (y su futuro sucesor como Luis el Piadoso). En 799, según los Anales del Reino de los Francos, el gobernador de Wasqa entregó a Carlomagno las llaves de la ciudad, en señal de su sumisión. El dominio franco, sin embargo, no se hizo efectivo, y en los años 801, 811 y 812 fracasaron tres nuevos ataques carolingios contra la ciudad.

Durante los siglos VIII y XI se construyó la mezquita de Wasqa en el emplazamiento de la actual catedral. Actualmente casi no quedan restos de la antigua mezquita salvo algunos arcos de herradura.

A partir del 875 el emir Muhammad I ordenó al gobernador de Wasqa que amurallase la ciudad y los arrabales para que se evitasen los ataques cristianos que cada vez había con mayor frecuencia. Las murallas árabes formaban un recinto ovalado de casi dos kilómetros de longitud, con alrededor de noventa torres y cuatro puertas principales, orientadas a los cuatro puntos cardinales.

 Huesca8

Murallas de Huesca

Tras la desaparición del califato de Córdoba, Wasqa formó parte de la taifa de Zaragoza, gobernada sucesivamente por las dinastías tuyibí y hudí. Lubb ben Hud, que gobernó en Wasqa, acuñó monedas de oro de baja ley, con inscripciones árabes y el nombre de la ciudad. Fue la única moneda de oro acuñada en Huesca a lo largo de su historia.

Uesca cristiana y aragonesa

Sancho Ramírez, el segundo rey de Aragón, construyó Montearagón, un gran castillo a pocos kilómetros de Wasqa, con objeto de preparar su conquista. En su interior se levantó una iglesia. La construcción de la fortaleza estuvo cargada de simbolismo: erigido en tierras que aún eran musulmanas.

Huesca9 

El Castillo de Montearagón

En el año 1094 el rey Sancho Ramírez murió ante las murallas de Huesca en un intento de conquistar la ciudad, al recibir un flechazo, siendo tomada finalmente por su hijo Pedro I de Aragón en 1096, que derrotó a Al-Musta'in II de Zaragoza en la batalla del Alcoraz.

El 7 de septiembre de 1134 murió Alfonso I el Batallador a consecuencia de las heridas recibidas durante el combate en la aldea de Poleñino y fue sepultado en la abadía de Montearagón.

Huesca10 

José Casado del Alisal. La campana de Huesca, 1880, óleo sobre lienzo.

En 1135 ocurrieron los hechos que dieron lugar a la leyenda de la Campana de Huesca. El rey Ramiro II de Aragón, según la leyenda, decapitó a doce nobles que se le opusieron. Este murió en Huesca en agosto de 1157 y fue enterrado en el Monasterio de San Pedro el Viejo de Huesca. El 29 de junio de 1136 nació Petronila de Aragón, hija de Ramiro II e Inés de Poitou, futura reina de Aragón y condesa de Barcelona.

En 1155 el rey Luis VII de Francia pasó por Huesca. Vino para peregrinar a Santiago de Compostela y visitar al rey Alfonso VII de Castilla, con cuya hija se había casado tras su célebre divorcio de Leonor de Aquitania.

Huesca11 

Leonor de Aquitania y Enrique II de Inglaterra – Abadía de Montevrault

El día 12 de mayo de 1191 fue firmada la Liga de Huesca entre los representantes de los reyes Alfonso II de Aragón, Sancho VI de Navarra, Alfonso IX de León y Sancho I de Portugal con el propósito de hacer la guerra al reino de Castilla, donde reinaba Alfonso VIII de Castilla.

En 1273 comenzó la construcción de la actual catedral ya que en ese momento se alcanzaron los 8000 habitantes, el máximo demográfico medieval de la ciudad.

Durante el siglo XIII experimentó un considerable desarrollo agropecuario. En el siglo XIV el rey Pedro IV fundó la más importante Universidad de Aragón, "descendiente" de la antigua Universidad Sertoriana.

La peste negra de 1348 causó estragos en la ciudad y la población menguó de los 8.000 a finales del siglo XIII hasta los 4.000 en el siglo XV. Una causa de esta crisis fue el paro de la construcción de la catedral. En el año 1349 se prohibió por ordenanza municipal el uso del hebreo, del árabe y del vasco en el mercado de la ciudad imponiendo así el idioma cristiano de la época, el aragonés. Fragmento de las Ordenanzas Municipales de Huesca de 1349:

"Item muyl corredor nonsia usado que faga mercaderia ninguna que compre nin venda entre ningunas personas, faulando en algarabía ni en abraych nin en basquenç: et qui lo fara pague por coto XXX sol"

Anyo 1349

Huesca12 

El triunfo de la Muerte -- Pieter Brueghel el Viejo, 1562 – Óleo sobre tabla.

Entre 1357 y 1359 se produjo una guerra entre Castilla y Aragón. Durante la primera fase de la Guerra de los dos Pedros, que enfrentó a los reyes Pedro IV de Aragón y Pedro I de Castilla, se emprendieron en Huesca, ante la amenaza de un ataque castellano, importantes obras. Fueron devueltas a las murallas, por última vez, todo su potencial defensivo.

En 1461 el Concejo se estableció en una nueva sede en la plaza de la Catedral (las Casas de la Ciudad), en la que sigue hoy. De ese momento inicial se conservan el patio y el salón del justicia ―dos grandes salas superpuestas con techumbres de madera. En los siglos XVI y XVII las autoridades municipales acometieron diversas obras en el edificio (escalera monumental, antiguo salón de plenos, fachada de ladrillo), que terminaron dándole el aspecto que tiene en la actualidad. Entre 1463 y 1465 se produjo la refundación definitiva de la Universidad de Huesca.

Edad Moderna

Huesca13 

Escudo de la Universidad de Huesca, 1601.

Durante el siglo XVI y el siglo XVII la ciudad empezó a resurgir culturalmente y demográficamente, se consolidó definitivamente la Universidad de Huesca en una sede permanente, se alcanzó un acuerdo en 1513 para que la Universidad se instalase en el antiguo palacio real. La imprenta llegó a la ciudad en 1575 gracias a la propia Universidad y un año después se publicó el primer libro basado en los comentarios en latín a la lógica y la dialéctica de Aristóteles.

También hubo en ese siglo grandes personajes como Vincencio Juan de Lastanosa, mecenas de Baltasar Gracián y Francisco de Artiga.

 Huesca14

Baltasar Gracián

El siglo XVIII comenzó con la guerra de sucesión. Felipe V abolió el antiguo concejo oscense, nacido en la Edad Media, que estaba presidido por el justicia de Huesca y el prior de jurados y lo sustituyó por un ayuntamiento similar a los castellanos, a cuyo frente estaban un corregidor, por lo general militar, y doce regidores oscenses fieles a los Borbones. La Universidad vivió un periodo brillante: cientos de estudiantes catalanes acudieron a ella, al haber sido cerradas las universidades de Cataluña por los Decretos de Nueva Planta.

Edad Contemporánea

La Guerra de la Independencia Española en Huesca se sucedió con el asesinato en junio de 1808 el coronel Antonio Clavería, corregidor. Durante los Sitios, fuerzas oscenses participaron en la defensa de Zaragoza. El periodo de dominio francés en la ciudad se extendió de 1809 a 1813. La ciudad fue constituida como capital de provincia durante la división provincial de 1833.

Durante la Primera Guerra Carlista tuvo lugar una batalla ante la ciudad entre las tropas isabelinas y las carlistas de la Expedición Real que se dirigió de Navarra a Cataluña y que acabaron de ocupar la ciudad. Los carlistas vencieron al general Iribarren que murió a resultas de sus heridas durante la batalla.

Huesca15 

En 1845 desapareció la Universidad de Huesca, cinco siglos después de su fundación. En el mismo edificio se creó el actual Museo de Huesca. En 1848 el republicano oscense Manuel Abad y seis de sus compañeros fueron fusilados en Huesca, tras los acontecimientos revolucionarios de ese año. En 1864 llegó por primera vez el ferrocarril a la ciudad.

Huesca superó por primera vez los 10 000 habitantes a comienzos del siglo XX. El escritor Ramón J. Sender fue durante estos años redactor del periódico oscense "La Tierra" y su hermano Manuel Sender, que fue alcalde de Huesca durante la II República donde murió fusilado al comienzo de la Guerra Civil.

Lengua Aragonesa y Aragonés Somontano

El Anteproyecto de la Ley de Lenguas de Aragón de 2001 reconoció a Huesca como municipio que podía ser declarado zona de utilización predominante de su respectiva lengua o modalidad lingüística propia o zonas de utilización predominante del aragonés normalizado, lo que llevaba a cabo que el nombre oficial cambiaría por el de "Huesca/Uesca", aunque la ley no se llegó a aprobar.

 Huesca16

Mapa de situación de los dialectos aragoneses

En la ciudad se habla un dialecto aragonés muy castellanizado llamado somontanés. A partir de la década de los años 1950 se ha ido perdiendo gradualmente los caracteres generales del idioma pero actualmente se ha conseguido revitalizar un poco gracias a la creación del Consello d'a Fabla Aragonesa y otras asociaciones culturales. Los artículos aragoneses, o, os, a, as, y la partícula pronominal adverbial en/ne, la construcción le'n, les ne, la preposición ta o el diminutivo –ed/-er eta.

La sonorización de las sordas intervocálicas latinas como el caso de (forato) agujero, melico o (rete) red. También hay casos, menos que en los anteriores de sonorización de la oclusiva tras la líquida. El fonema -x- se pierde y se vuelve -ch-, pero en muchos lugares se mantienen el demostrativo ixe, ixa, ixo, ixos, ixas. El diminutivo -et suena como -ed o -er según en que zonas. También quedan bastantes sustantivos y palabras aragonesas que se usan diariamente con el castellano. Cabe decir que estos caracteres son usados más por las generaciones más adultas.

La leyenda de la "Campana de Huesca"

Huesca17 

Ramiro II de Aragón.

“– Don Ramiro de Aragón, el rey monje que llamaban, caballeros de sus reinos asaz lo menospreciaban, que era muy sobrado manso y no sabidor de armas, por lo que no le obedecen, por lo que le desacatan.

Enviado ha un mensajero al monje que lo criara, a San Ponce de Tomeras donde el buen abad moraba, porque él le diese consejo en la bajeza en que estaba. El mensajero se parte y al abad le da una carta.

El abad no le responde; en la huerta sólo entraba el mensajero con él, que respuesta le demanda. El abad le despachó sin hablarle una palabra.

La respuesta que le diera fuera cifra bien cerrada, que sacando allí un cuchillo, las ramas altas cortaba. Despedido el mensajero, mal contento se tornaba. Como fue llegado al rey, le dijera estas palabras:

-“Mal recaudo os traigo, rey, que el monje no vos preciaba, ni me quiso dar respuesta; creo que de vos burlaba; entróse luego a una huerta en leyendo vuestra carta, y afilando allí un cuchillo, las ramas emparejaba.

“Oyendo aquestas razones el rey las disimulara: Entendió bien la respuesta y el consejo que le daba.

Hizo llamar a las Cortes, a Cortes que celebraba: dice que hacer quería una solemne campana que se oyese por el reino y sonase en toda España.
Viérades de esto gran risa; los grandes de ello mofaban.

En esa ciudad de Huesca muchas gentes se juntaban; Llamó un día a los señores, y en su cámara les habla, y a sus hijos herederos hizo quedar en la sala.
En entrando, todos ellos viéronse entre gente de armas; mandó cortar las cabezas a los que más se burlaban. Quince fueron sentenciados, a los otros perdonara.

Mandó sacar las cabezas a los mozos de la sala: díjoles que eran sus padres todas las que allí miraban, porque le tenían en poco y en su presencia burlaban; que viesen aquel ejemplo, y ellos mojasen la barba.

Así fue temido el monje con el son de esta campana.

(Romance viejo) Anónimo

Las brujas de Huesca

– Sin duda, esta provincia aragonesa es la que tiene mayor tradición brujeril. Es una referencia que José Antonio Adell y Celedonio García incluyen en su libro “Historias de nuestros pueblos”

Basta con repasar muchos de los topónimos existentes para darse cuenta de ello. En Búbal, por ejemplo, existe una exposición dedicada a las brujas, algo verdaderamente insólito. También se aborda esta temática en el Museo de Artes populares “Ángel Orensaz”, de la localidad serrablesa de Sabiñanigo. Como justificación de lo dicho, ahí van algunos ejemplos: En Tramacastilla hay un Bosque de las Brujas; en Gavín, la Caseta de las Brujas; en Aquilué, en Nocito y en Ibirque, la “Caseta de la Bruja”, en singular, para una sola. En Aineto hay otro topónimo llamado “las Brujas” en plural.

Huesca18 

Al parecer, las brujas eran muy aficionadas a esconderse en los bosques y a ocultar casetas solitarias en aquellos puntos más estratégicos.

También, en Biescas, junto al barranco de Aratiecho, existe una caseta llamada de “Las Brujas”.

Dicen que la bruja Maut era de aquella zona y cuentan que hacía ladrar a las personas como a los perros. En cierta ocasión, “un sastre se encontró, sin buscarlo en la reunión del aquelarre, cundo vio a las brujas pasar a realizar el ósculo anal al diablo en forma de macho cabrío”. El sastre sacó su punzón y le pinchó. Luego, la segunda vez que volvieron a pasar, cuando le toco el turno al sastre, el diablo se volvió y le dijo, “Tu pasa, pero no beses”


Como cabe suponer, el buen sastre jamás regresó por aquellos lugares por temor a volver a vivir tan desagradable experiencia.

La concepción de Jaime I el Conquistador

– Estamos en Huesca, Pedro II el católico ( 1196/1213 ) hijo de Alfonso II y nieto de Petronila, casado con María de Montpellier.

La concepción de su hijo Jaime I El Conquistador dio pié a numerosas leyendas. La más conocida el libro del Feyts de Muntaner en romance, es un tanto fantasiosa, por lo que me remito a esta última en verso, que parece más juiciosa.

 Huesca19

Angustiada esta la reyna, y no sin mucha razón porque noble Rey don Pedro su marido y su señor no hacia caso della mas que si fuera varón, no le pagaba la deuda que tenia de obligación, antes con otras mujeres tenia su delectación.

Vino le al pensamiento una loable invención, hablo con el camarero sin guardar mas sazón, tu has de dar a entender al buen rey nuestro señor quessa muger quel festeja vendrá sin mas dilación a dormir con su alteza mas con esta condición, que en la cámara no haya candela ni resplandor.
Quiso dios por su bondad que a la reyna le otorgo lo que tanto deseaba ques fruto de bendición porque el noble rey don Jayme essa noche se engendro.

Rutas por el medioevo oscense

(Montañana, Ainsa, Alquézar y el Somontano)

MONTAÑANA

Huesca20

Se encuentra en el valle del Noguera Ribagorzana, en un tozal delimitado por los barrancos San Miguel y San Juan. Su lengua propia es el catalán en su variedad dialectal ribagorzana, al encontrarse en la Franja.

El pueblo ha mantenido el patrimonio románico y medieval por el cual se declaró conjunto histórico-artístico en 1984.

Los primeros datos sobre Montañana aparecen en el año 987 en el cartulario del monasterio de Alaón como castrum de Montagnana (castro de Montañana), de filiación cristiana. Los habitantes de ese castrum compartían espacio con las órdenes militares de los hospitalarios y los templarios, defendiéndose de incursiones musulmanas en 1017 dirigidas por Abd el Malik.

A partir de 1834 fue capital del municipio, pero con la despoblación del medio rural de la década de los años 1960, el ayuntamiento se trasladó a Puente de Montañana y comenzó un declive que hizo peligrar el conjunto medieval.

El pueblo fue antiguamente una plaza amurallada pensada para sobrevivir en la frontera musulmana del siglo XI. Tiene dos barrios, la parte baja y la alta. La baja es abrazada por un pequeño riachuelo y en ella se encuentran las casas de cultivo. La alta se encuentra más protegida y concentra el patrimonio románico. Ambas estaban unidas por un puente gótico de doble arcada. Las calles totalmente empedradas son un conjunto enrevesado de pasadizos, porches y rampas con casas de piedra y con tejas árabes.

Aun así alrededor del núcleo se hallan caseríos aislados y diversos pajares y bordas. Estas construcciones, reformadas y ampliadas, constituyen un ejemplo de las construcciones rurales de los últimos tres cientos años.

Si cruzamos el puente sobre el Noguera, nos encontramos en la provincia de Lérida ya en tierras catalanas. A pocos kilómetros nos encontramos con un lugar único y espectacular…El Congost de Mont-rebei.

Huesca21 

El Congost de Mont-rebei es una de las rutas más espectaculares. De él se ha dicho que es el “único gran desfiladero del territorio virgen”, un estrecho recorrido que sigue una ruta excavada (1982) en la roca siguiendo el cauce del río Noguera Ribagorzana, una pared de Cataluña y la otra de Aragón. Se encuentra, entre las comarcas de La Noguera y el Pallars Jussà, atravesando la Serra del Montsec.

En los puntos más vertiginosos, de hasta 500 m de acantilado, se han dispuesto pasamanos. También bancos durante la ruta. Hay quien se atreve a recorrerlo en bicicleta y en verano abundan los recorridos en kayak, sobrecogidos estos por un vértigo invertido. El atractivo principal, además del eterno paisaje, es el puente colgante del Barranco de Sant Jaume: 40 m de vacío bajo nuestros pies.

AÍNSA

Huesca22 

La Peña Montañesa

Decir Aínsa es decir la Peña Montañesa. La Peña Montañesa (2295 msnm) es la cota máxima de la Sierra Ferrera, en la comarca oscense del Sobrarbe. Se encuentra al norte de Aínsa, desde donde se divisan perfectamente sus impresionantes paredones.

Desde los inigualables miradores del conjunto medieval de Ainsa se puede divisar esta emblemática montaña que está como vigía de su entorno y que tiene toda la magia como puerta del Pirineo Oscense.

Su núcleo original, que se emplaza en un promontorio sobre la confluencia de los ríos Cinca y Ara, está formado por dos calles casi paralelas, la calle Mayor y la calle Santa Cruz, por la plaza Mayor que se sitúa a continuación del castillo situado en una explanada, a proximidad de la Cruz Cubierta, templete donde la leyenda sitúa el milagro de la aparición de la cruz de fuego sobre una carrasca, que dio la victoria a las tropas cristianas al mando del rey García Jiménez.

Aunque la leyenda sitúa el nacimiento de Aínsa en la conquista de la plaza por las tropas del rey Garcí Ximénez en el año 724 gracias al milagro de la cruz de fuego (desde el siglo XVI hay una cruz en el lugar donde supuestamente ocurrieron los hechos) las fuentes históricas apuntan que los musulmanes no llegaron a establecerse en esta tierras.

Huesca23 

Puerta Portal de afuera de la muralla.

El castillo de Aínsa, que data del siglo XI, formó parte de la línea de defensa de los territorios cristianos (línea que se extendía hasta Abizanda), y se convirtió en el embrión de la villa, que en tiempos de la Edad Media fue amurallada, y se convirtió en la capital del condado de Sobrarbe que perteneció al reino de Nájera-Pamplona (antes de que éste diera lugar al reino de Navarra) y luego se integrara en el reino de Aragón.

En 1124 el rey Alfonso I el Batallador otorgó la Carta puebla por la que se beneficiaba a sus habitantes con el fuero de Jaca.

La importancia de la plaza llevó que la iglesia de Santa María fuera concebida también como defensa, tal y como atestiguan las saeteras de su torre.

Huesca24 

Siglo XX

La pérdida de importancia de la comarca del Sobrarbe llevó a una relajación de la actividad de Aínsa que se mantuvo en un estado de subsistencia hasta principios del siglo XX cuando las actividades tradicionales se vieron perturbadas con los planes de construcción de diferentes presas, pantanos y otros sistemas hidráulicos, destinados a la producción de electricidad y al suministro de agua para la llanuras del Ebro.

Huesca25 

Esta actividad llevó a la expropiación y pérdida de las mejores tierras de cultivo de los valles y a la emigración de sus gentes. Muchos de los pueblos vecinos vieron cómo desaparecían la totalidad de sus habitantes y en otros como éstos disminuían drásticamente. Esto llevó a que pasaran a depender del ayuntamiento de Aínsa.

La limitación de recursos de todo tipo que la baja densidad de población y la complicada orografía provocan llevaron a una crisis importante a mediados del siglo XX. Esta crisis fue superada mediante el recurso turístico y el florecimiento del turismo rural y natural.

La creación de varios parques naturales y naturales, primero el del Ordesa y Monte Perdido seguido de otros como el de la Sierra de Guara y la afición a la montaña y a los deportes de aventura se convirtieron en la actividad económica más relevante.

Monumentos

El propio núcleo urbano original de Aínsa es en sí mismo un monumento digno de visitarse, tal como se reconoció en su declaración de Conjunto Histórico Artístico. Dentro de él destacan:

Castillo de Aínsa, data de los siglos XI y XVII, siendo una obra de varios siglos que conserva muy pocos elementos del original edificio románico. Destacan en él la Torre del Tenente, de planta pentagonal, hoy convertida en un EcoMuseo, el gran patio de armas y un portalón que se abre a la plaza Mayor.

Iglesia parroquial de Santa María, románica iniciada en el siglo XI y finalizada en el XII. Se consagró en 1181. De sencilla portada de cuatro arquivoltas apoyadas en otros tantos pares de columnas de capiteles labrados. Su torre, de dimensiones únicas en el románico aragonés, hace imprescindible su visita, con saeteras para la defensa.

Casa de Bielsa, del siglo XVI o XVII con unas ventanas reseñables que destacan de las construcciones del entorno.

Huesca26 

Casa Arnal, del siglo XVI ejemplo de edificación típica de la comarca con sus portadas y rejas. El concepto de casa no abarca únicamente el edificio físico, sino que se extiende a las propiedades familiares y a los miembros que componen la familia o conviven en ella.

Plaza Mayor, presidida por el edificio del ayuntamiento y abierta al castillo, se rodea por soportales en ambos lados. En estos soportales se ubican sendas prensas comunitarias en las que se realizaba la prensa de la uva.

ALQUÉZAR

Huesca27 

Alquézar, Colegiata y villa medieval se yergue sobre el Cañón del Río Vero, un enclave único de salvaje belleza en el que todavía es posible retroceder en el tiempo mientras se recorren sus estrechas callejuelas, se cruza la muralla de la Colegiata o se escuchan viejas leyendas de doncellas y reyes moros…

Esta villa ofrece la posibilidad de revivir el lejano pasado medieval al recorrer sus calles y rincones más emblemáticos. Por ejemplo, el portalón gótico de acceso a la antigua villa o la antigua Plaza Mayor, una plaza porticada donde cada una de las casas cuenta con una solución arquitectónica diferente.

Siguiendo el recorrido de las calles, en lo alto se halla la Colegiata de Santa María la Mayor, emplazada donde antaño estuvo la antigua fortaleza musulmana y que se mantiene inexpugnable, protegida por lienzos de muralla, torres albarranas…Esta monumental Colegiata ha visto como el trascurrir de los siglos y las diferentes corrientes artísticas, dejaban su huella. Del primitivo templo románico tan solo se conserva el atrio decorado con capiteles historiados. Posteriormente, en el siglo XIV se construyó el claustro gótico que aprovecha e integra las arcadas románicas.  La actual iglesia – Colegiata fue construida en estilo gótico-renacentista en el siglo XVI.

Huesca28 

De la importancia y gran trasiego de Alquézar también hablan los restos de presas, molinos y puentes próximos, como Fuendebaños o Villacantal. Construcciones que destacan tanto por su calidad como por la grandiosidad del paisaje en el que se inscriben.

Historia

Debe su nombre al castillo o Al-Qasr construido para defender el acceso a la Barbitanya.

Siglo IX. Jalaf ibn Rasid mandó construir el castillo y se convirtió en el principal punto de defensa de Barbastro frente a los reinos cristianos del Sobrarbe.

El 28 de agosto de 1067, el rey Sancho Ramírez de Aragón concedió la villa de Beranuy y Santa María de Sabiñánigo al abad de Fanlo "porque fabricasteis la torre en Alquézar" .

El 27 de abril de 1069 Sancho Ramírez, concedió fueros a Alquézar

En 1075 Sancho Ramírez, concedió privilegios a Alquézar "cuando se levantó el sitio de los sarracenos"

En febrero de 1125 el rey Alfonso I el Batallador otorgó fueros a Alquézar.

 Huesca29

Fue de realengo desde su conquista hasta 1202

En 1218 el rey Jaime I de Aragón dio al obispo de Tortosa la iglesia de Alquézar.

El 6 de febrero de 1233, estando en Sariñena, Jaime I de Aragón concedió a Artal de Foces el castillo y villa de Alquézar.

El 25 de septiembre de 1245 Jaime I de Aragón confirmó a los hombres de Alquézar los fueros dados por el rey Sancho Ramírez, otorgando los privilegios de feria y mercado. El 28 de enero de 1290 era de realengo.

En 1295 era de realengo.

En 1327 se deslindaron los dominios entre los términos de Alquézar y Alberuela de la Liena.

El 5 de septiembre de 1357 el rey Pedro IV de Aragón vendió a Pedro Jordán de Urriés el castillo y villa de Alquézar.

El 11 de junio de 1372 Pedro IV entregó el castillo y villa de Alquézar a Gonzalo González a cambio de Ricla.

El 22 de marzo de 1380 Violante de Urrea vendió el castillo, villa y aldeas de Alquézar al rey Pedro IV.

El 1 de junio de 1398 el rey Martín I de Aragón confirmó la compra de Colungo por los de Alquézar.

En 1610 eran de Alquézar las poblaciones de Asque, Colungo, Buera, Radiquero y San Pelegrín.

1960 – 1970 se le unió Radiquero.

En 1966 el Castillo Colegiata fue declarado Monumento Histórico Artístico Nacional.

En 1982 el casco urbano fue declarado Conjunto Histórico-Artístico.

Huesca30

Pero Ainsa tiene mucho más que la propia población, en su entorno tenemos el Parque Natural de la Sierra y Cañones del Guara, el Parque Cultural del Río Vero (con un interesante complemento de flora y fauna), un importante conjunto de Arte Rupestre y algo más cercano a nosotros aunque su historia se remonte al principio de los tiempos…el vino. Con la denominación de Somontano podemos disfrutar de sus bodegas y sus caldos.

Parque Natural de los Cañones y la Sierra de Guara y Parque Cultural del Río Vero

 Huesca31

El parque natural fue declarado como tal el 27 de diciembre de 1990 por la ley 14/1990 del Gobierno de Aragón bajo el nombre de Parque de la Sierra y Cañones de Guara.

La naturaleza es de carácter cárstico, con abundantes dolinas, grutas, colinas, simas y cañones, además de los mallos y galerías subterráneas. Los suelos están formados por materiales calcáreos, de ahí que a los cañones erosionados por los ríos y torrentes se sumen otros modelados cársticos.

Vegetación

El acusado desnivel y la sinuosidad del relieve, junto con la orientación noroeste-sudeste y la diversidad de suelos, proporciona una gran variedad en los recursos ecológicos y biológicos del Parque Natural.

En la vertiente Norte, el quejigar ocupa grandes extensiones, siguiéndolo en altura los pinares de pino silvestre y bosquetes de hayas. A mayor altura encontramos al pino negro, acompañado por algunos pies de abetos. En la vertiente Sur, es el bosque mediterráneo por excelencia, el encinar, el predominante, junto al pino silvestre a mayor altitud. En todo el Parque Natural, el matorral es una de las formaciones vegetales más importantes, sobre todo de boj, erizón y, en menor medida, coscoja.

Huesca32    Huesca33

                                         Erizón                                                                                                 Coscoja

En las cumbres de la Sierra, la vegetación característica la conforman especies herbáceas, allí donde los canchales permiten su asentamiento, apareciendo flores de singular belleza como las verónicas o aquilegias.

También existen otro tipo de plantas endémicas del Parque Natural que son las llamadas "rupícolas".

Fauna

Las escarpadas paredes rocosas facilitan la nidificación de numerosas especies de aves rupícolas, como el buitre leonado, fácil de identificar por su característico vuelo en círculos al ascender en las corrientes térmicas, junto al quebrantahuesos y al águila real.

Huesca34 

Entre los mamíferos, destacan el jabalí, zorro, gato montés, lirones y la frecuente garduña.

La trucha común frecuenta los tramos de río, en los que se alimenta capturando sus presas con increíble agilidad. En los manantiales y remansos de aguas claras vive el tritón pirenaico, al que los pastores llaman guarda fuentes, pues cuentan que cuando desaparece, las fuentes se secan.

Huesca35 

Cultura

La presencia humana se percibe en Guara en los restos de arte rupestre y monumentos megalíticos.

La cueva de Chaves, en Bastarás, término municipal de Casbas de Huesca, albergaba unos de los yacimientos neolíticos más importantes de la península Ibérica antes de ser destruido.

Huesca36 

Las labores agrícolas y ganaderas tradicionales han transformado el paisaje a lo largo del tiempo, quedando hoy muestras de estos usos en bordas, ermitas de fábrica medieval, caminos tradicionales, puentes y pasarelas. Son numerosos los topónimos de la zona que recuerdan algunas de estas actividades, como almunia, paúles, etc..

Existen pinturas rupestres del Paleolítico Superior en la Fuente del Trucho.

Huesca37 

La presencia del hombre en la sierra no ha sido motivo de degradación, sino de mantenimiento de unos recursos que han perdurado hasta nuestros días en un estado de conservación tal, que ha merecido su declaración como Parque Natural.

Parque Cultural del Río Vero

Entre Guara y el Somontano, entre la abrupta montaña y los suaves piedemontes, siguiendo el curso del río, se articula el Parque Cultural del Río Vero, un espacio lleno de significación histórica en plena naturaleza.

Arte rupestre

Sin duda, el conjunto más relevante del Parque Cultural es su Arte Rupestre Prehistórico. Sorprende el gran número de estaciones pintadas y la diversidad de estilos que atesoran, todos los propios de la Prehistoria europea: paleolítico, levantino y esquemático. Sin olvidar la espectacularidad del marco natural en el que se encuentran.

La única muestra de Arte Paleolítico que puede encontrarse en Aragón se halla en la Cueva de la Fuente del Trucho. Es posible contemplar una recreación fotográfica de esta cavidad en el Centro de Arte Rupestre de Colungo.

Huesca38 

El Arte Levantino, expresión plástica naturalista de la sociedad de cazadores y posteriormente agricultores que habitó el Somontano entre el 8.000 y el 3.000 a.C. puede contemplarse en abrigos como los de Arpán o Chimiachas

Con representaciones de estilo Esquemático, realizadas entre el 5.000 y el 1.500 a. C. destacan entre otros, los conjuntos visitables de Mallata y Barfaluy.

El valor testimonial de los más de 60 abrigos con pinturas rupestres que acoge el Parque Cultural del Río Vero, ha merecido su declaración por la UNESCO como Patrimonio Mundial. Una visita a estos abrigos nos guiará a través de un mágico viaje por los últimos 20.000 años de presencia humana en estas tierras.
Siguiendo el río Vero descubriremos el legado –material e inmaterial- de las gentes que habitaron sus riberas, desde el Paleolítico hasta hoy: arte rupestre, dólmenes, ermitas románicas, iglesias góticas y templos barrocos, restos de fortificaciones, conjuntos rurales, leyendas…

Para terminar, que mejor que visitar a lo largo del Río Vero los viñedos y la bodegas de la Denominación de Origen Somontano, cultivado en. zonas verdes y abruptas, en ella la vid se cultiva en las terrazas de los valles que desembocan en el límite norte de la depresión del Ebro.

Huesca39 

El suelo contiene arenisca y arcilla, así como piedra caliza y material aluvial. Presenta escasa fertilidad y buen drenaje. La altitud oscila entre los 350 metros y los 650 metros.

El clima, continental, está suavizado por el abrigo que suponen los pirineos frente a los fríos vientos del norte. Aun así son frecuentes las heladas en invierno así como temperaturas extremas en verano. Las diferencias térmicas entre el día y la noche son también muy acusadas. La pluviometría media es de 500 mm.

Somontano significa al pie del monte y define perfectamente el área geográfica donde se asienta esta denominación de origen, ya que se trata de una zona de transición entre el valle del río Ebro y los Pirineos.

Fueron los romanos quienes consolidaron el cultivo de la vid que prosperó bajo la influencia de los monasterios en la edad media.

           Huesca40     Huesca41

(Monasterio de Obarra, Roda de Isábena y Graus)

Monasterio de Obarra

 Huesca42

Monasterio de Obarra

Camino de la sorprendente Roda de Isábena, nos encontramos con este monasterio situado a la orilla izquierda del río Isábena y que es digno de visitar por si mismo y también por el fantástico paisaje que le rodea.

El Cartulario de Alaón cita a los "monjes de Uvarra" en el año 874. Para el historiador Jerónimo Zurita: "Existía ya cuando los moros invadieron la península", anterior pues al año 710 si bien las actuales estructuras datan de los siglos XI y XII. No quedan edificaciones religiosas anteriores al XI. Abd-el Malik en sus razias e incursiones de castigo a los cristianos se encargó de arrasarlas todas.

Ello no quita para que estructuras parciales de las mismas se conservasen o reaprovechasen (Portada mozárabe de San Juan de la Peña. o arcos formeros de tipo asturianense de su iglesia inferior). De hecho, en Obarra se pueden hallar restos visigóticos procedentes de edificaciones previas como son los dos capiteles de la portada sur y los cuatro que en funciones de ménsulas decoran el altar mayor. También la tosca pila bautismal es de ese momento.

 

Huesca43El templo es un edificio de planta basilical, de tres naves de seis tramos cada una, precedidas de presbiterio; más alta la central y rematadas en sendos ábsides de tambor.

Al exterior, la decoración de los ábsides es típicamente lombarda, con friso de arcuaciones ciegas y de esquinillas; así como lesenas que estructuran los ábsides en tres paños. Es muy diferente a lo existente en el resto del territorio estudiado.

Huesca44 

"La construcción de Obarra se inició siguiendo un sistema de proporciones basado en la geometría del triángulo equilátero. A partir de los dos primeros tramos de la nave norte y central, este sistema fue alterado para seguir la proporción doble o diapasón. El conjunto de la iglesia se sometió a las llamadas armonías musicales, sistema proporcional arquitectónico más usado en la Alta Edad Media.

"Obarra" significa en vasco “agujero entre rocas” y está en el fondo de un valle bloqueado por el desfiladero de La Croqueta donde se alza el monasterio.

RODA DE ISÁBENA

Siguiendo nuestra ruta medieval nos encontramos con la siempre sorprendente población de Roda de Isábena, situada sobre un otero defensivo que servía de vigía a las incursiones externas. Nos sorprende también la magnífica catedral digna de una población de mayor importancia.

Huesca45 

Situada sobre una elevada atalaya dominando buena parte del curso del río Isábena, la localidad de Roda es el pueblo más pequeño de España que cuenta con una iglesia-catedral. Hablemos de ella:

"El establecimiento y posterior mantenimiento contra viento y marea de una diócesis propia de la Ribagorza obedeció, por encima de cualquier otra consideración, al designio de los condes y posteriormente de los reyes de Aragón de mantener a ultranza su autonomía frente a las apetencias, nunca acalladas, del obispado de la Seo de Urgell, peligrosamente afín a la casa condal de Barcelona, y del metropolitano de Narbona. Ello en una época en que los poderes político y religioso andaban muy mezclados”.

Varios nombres hay ligados a la catedral de Roda de Isábena, por motivos bien diversos:

Abd-Al-Malik, hijo de Almanzor; quien entre 1003 y 1006 asoló toda la Ribagorza sin que se librase Roda de Isábena.

San Ramón, obispo de esta diócesis en el primer cuarto del siglo XII; cuyos restos descansan en el magnífico sarcófago ubicado en la cripta central mandada construir por él mismo.

Mosen José María Leminyana (Barcelona 1925 - Barbastro 2009), párroco que fué de la localidad, distinguido con la Cruz de Alfonso X el Sabio (2001) fue quien sospechó la existencia del ábside norte de la catedral, lo puso de manifiesto y restauró con su propio trabajo físico. Asimismo recuperó multitud de obras medievales de la comarca.

Erick, "El Belga", quien perpetró el robo de valiosa piezas de arte en la madrugada del 6 al 7 de Diciembre de 1979; destacando la silla de San Ramón del siglo IX que fue troceada y de la que se pudieron recuperar algunos fragmentos. Fué "la cruz del cura Leminyana" y el detonante para que las obras de arte en nuestros templos cuenten con mayores medidas de seguridad. Aunque sabemos que muchos de sus robos se perpetraron con algunos beneplácitos,

Huesca46

Un poco de Historia

Con el Morrón de Güell al fondo sobre la cumbre de una colina, el caserío de Roda de Isábena se apiña en torno a la catedral, que fue sede de un obispado del que ya hablan los documentos del siglo X. Los olivares constituyeron la principal riqueza del lugar, que los árabes convirtieron en reunión de tributos, con un molino de aceite. Todavía se conserva la gran rueda para la prensa, a espaldas de la catedral. Algunos historiadores basan en ello el origen del nombre dado al pueblo; otros se refieren a la Rota romana.

Huesca47 

Aunque el mayor interés de Roda de Isábena se centra en su catedral, el conjunto urbano es todo él sumamente interesante por su pintoresquismo y especial distribución de las calles sobre el monte.

Historia Medieval: El condado independiente de Ribagorza, dentro del proceso de concreción de su personalidad histórica, cuenta con obispos propios incluso antes de la instauración canónica de su sede episcopal en Roda (la actual Roda de Isábena). Los afanes independentistas del conde Ramón I y un movimiento de insubordinación a la metropolitana narbonesa, de la que dependían estos territorios como vinculados a la diócesis de Urgel , culminarán en el año 888 con la presencia del obispo Arnulfo, con jurisdicción sobre los estados del conde Ramón I.

Historia Moderna y Contemporánea: El Renacimiento llega a Roda, en cierto modo, de la mano de dos miembros de una ilustre familia aragonesa y universal que por aquel entonces se hallaba encaramada a la cúspide del Pontificado: Juan de Borja y su sobrino Gil de Borja, que ocuparon sucesivamente el cargo de prior claustral, llenan con su personalidad casi medio siglo de historia rotense, al menos entre 1497 y 1545; y de la mano también de otro no menos ilustre aragonés, Pedro Agustín, quien, como prior mayor, lleva a Roda al escultor Gabriel Yolí , autor del retablo mayor, y por otra parte, revitaliza el canto coral.

Roda sufrió los efectos devastadores de la guerra de Secesión de Cataluña, contribuyendo con diversas cargas; su prior, Tomás de Bielsa, fue agredido durante el saqueo de la catedral.

Huesca48 

En la guerra de Sucesión, Roda, convertida ya en villa al no ser cabeza de sede episcopal, se pronuncia por el Archiduque y, con la ayuda de Miguel Marge, que manda una columna de «migueletes» alemanes, hace frente con adversa fortuna al ejército borbónico del duque de Orleáns; los austracistas son derrotados y los franceses ocupan la villa, desalojados por los del Archiduque, vuelven de nuevo los borbónicos practicando en represalia un brutal saqueo, que quedaría reflejado en un curioso y angustiado Tratado de las Lágrimas que derramó la villa de Roda en semejante ocasión.

La colegiata de Roda sufrió los embates de la Desamortización el 14 de mayo de 1843, y sus bienes fueron puestos a pública subasta.

Huesca49 

GRAUS

Huesca50 

Es capital administrativa de la comarca. Con una población de casi 4.000 habitantes (2.750 pertenecientes al pueblo y el resto a los pueblos dependientes) se sitúa como el pueblo más grande de toda la comarca. Es una de las zonas de Aragón en las que se conserva como lengua el aragonés, aquí en una variante bajorribagorzana (grausino).

Graus se encuentra en la confluencia de los ríos Ésera e Isábena

Los primeros datos de población de Graus se remontan al Paleolítico como lo demuestran los restos hallados en el yacimiento de Las Forcas, cuyos restos se encuentran en el museo provincial de Huesca. De la época romana no quedan restos y de la islámica solo se conservan restos de una atalaya en la peña del Morral.

 Huesca51

Durante la Reconquista, el rey aragonés Ramiro I murió durante el asedio de la población en 1063. Fue su hijo el rey Sancho Ramírez quien la tomó en el año 1083 y la adscribió al monasterio de San Victorián para su reconstrucción y repoblación, lo cual duró hasta 1571.

Un hecho fundamental para la tradición local se produjo en el año 1415 cuando, de camino hacia Francia, visitó la villa el dominico valenciano fray Vicente Ferrer, posteriormente canonizado, quien al parecer recaló en Graus invitado por Berenguer de Bardaxí. Ambos habían sido compromisarios tres años antes en Caspe, donde se resolvió de manera pacífica el difícil problema sucesorio de la Corona de Aragón.

En 1588, Felipe II estableció la celebración de una feria semanal todos los lunes que ha perdurado hasta ahora.

Durante el siglo XVII se sucedieron guerras contra Francia, con lo que Graus se convirtió en punto de paso y proveedor de comida de las tropas. En los años 1651 y 1652 la zona sufrió una epidemia de peste que diezmó a la población.

En la Guerra de Sucesión a principios del siglo XVIII la población tomó partido por el pretendiente austriaco, al igual que la mayor parte de la Corona de Aragón. Las tropas borbónicas ocuparon la localidad.

Durante la Guerra de la Independencia Graus fue invadida por las tropas francesas y en las posteriores guerras carlistas se produjeron enfrentamientos entre liberales y absolutistas. En 1873 estuvo encarcelado Paul Lafargue, yerno de Karl Marx y propagador de sus ideas, que había huido de la policía francesa atravesando los Pirineos. A finales de este siglo, se produjo una importante emigración a Francia.

 Huesca52

Joaquín Costa

No podemos abandonar Graus sin mencionar a Joaquín Costa. Fue un político, jurista, economista e historiador español, el mayor representante del movimiento intelectual decimonónico conocido como “regeneracionismo”, con sus conocidos lemas «escuela y despensa» y «doble llave al sepulcro del Cid para que no vuelva a cabalgar».

Un personaje al que deberíamos dar homenaje cada día. Nació en 1846 y murió un 8 de febrero de 1911 y era conocido como “El León de Graus”.

Huesca53 

Retrato de Joaquín Costa de 1913, obra de Victoriano Balasanz

Hijo de Joaquín Costa Larrégola, pequeño propietario rural, y de María Martínez Gil, a los pocos años de edad se traslada a Graus, iniciando sus primeros estudios en la cátedra de Latinidad de Graus. Trabajó y estudió en Huesca bachillerato y título de maestro superior y Madrid, donde se doctora en Derecho civil y canónico (1872) y en Filosofía y Letras (1873).

Escribe La vida del Derecho (1876) y fue profesor auxiliar en la Universidad Central, cargo al que renuncia en protesta por la política educativa de la Restauración junto a Francisco Giner de los Ríos y otros miembros de la Institución Libre de Enseñanza.

A esta institución laica de enseñanza, inspirada en la filosofía del krausismo, se halla ligado entonces dirigiendo su Boletín (1880–1883), dando clases y participando eficazmente en el Congreso Pedagógico Nacional de 1882.

Sus humildes orígenes le inclinan a la política; estudia particularmente las raíces populares del derecho consuetudinario español (Introducción a un tratado de política textualmente de los refraneros, romanceros y gestas de la Península, 1881) y el mundo rural al participar en los Congresos de Agricultores y Ganaderos (1880–1881). Participa también en numerosos mítines y conferencias africanistas y abolicionistas, planteando su visión de El comercio español y la cuestión de África (1882).

La intensa labor geográfica desarrollada durante estos años (1882-1887), tiene como objetivo incorporar a España a las políticas de expansión y al “espíritu civilizador que agita a todas las naciones europeas”.

En el segundo tomo del Colectivismo Agrario en España (1898) presenta Costa lo que viene a ser una amplia historia económica de los sistemas de propiedad y sus diversas modalidades (desde los cotos a las tierras concejiles y comunales), las formas de explotación, etc., remontándose a dos siglos antes de nuestra era; también, con notable agudeza, trata del control sobre el agua y sus diversas formas de propiedad, de las cofradías pesqueras, etc.

Huesca54 

Atribuyó  responsabilidades por la situación española a la propia monarquía en "Quiénes deben gobernar después de la catástrofe, Reconstitución y europeización de España" y, sobre todo, la encuesta realizada desde el Ateneo de Madrid con la colaboración de muchas grandes figuras de la cultura y la sociedad españolas (de Miguel de Unamuno a Emilia Pardo Bazán) para redactar uno de sus títulos clásicos: Oligarquía y Caciquismo como la forma actual de gobierno en España: urgencia y modo de cambiarla (1901), una denuncia de la corrupción del sistema político canovista de la Restauración que supondrá la marginación de Costa de los centros políticos del sistema.

Como resumen definitivo de la encuesta (1902) elabora un programa de once enunciados prácticos, casi su testamento político, en el que mezcla grandes horizontes y algunas obsesiones menores, casi comarcanas:

Huesca55

              Joaquín Costa junto a Melquíades Álvarez y Segismundo Moret.

1-Cambio radical en la aplicación y dirección de los recursos y energías nacionales (presupuesto volcado en educación, colonización interior, obras hidráulicas, repoblación forestal, investigación científica, etc.)... «en suma, desafricanización y europeización de España».

2-Reforma de la educación en todos sus grados, «rehaciendo y refundiendo al español en el molde europeo» (el plan es muy detallado y se observa en él la impronta de Giner de los Ríos).

3-Abaratamiento rápido del pan y de la carne (aumentando la productividad y favoreciendo el crédito agrícola).

4-Propuso un sistema de nuevo comercio con el que Jesús Gancedo dirigente de la asociación de comercio e importación de materias saliese de sus problemas económicos y así pudiese fijarse en la completa destrucción del sistema político actual.

5-Mejoramiento de los caminos de herradura.

6-Suministro de tierra cultivable, con calidad de posesión perpetua y de inalienable, a los que la trabajan y no la tienen propia. ¿Cómo? «Derogando las leyes desamortizadoras relativas a los concejos, autorizando a los Ayuntamientos para adquirir nuevas tierras, creando huertos comunales... Donde esto no baste, expropiación y arrendamiento o acensuamiento de tierras...».

7-Legislación social (contrato de trabajo, seguro social, cajas de retiro).

8-«Sanear y europeizar nuestra moneda, mediante la europeización de la agricultura, de la minería y del comercio, de la educación nacional, de la administración pública y de la política, así general como financiera, que reponga la confianza de Europa en nosotros».

9-Creación de un poder judicial digno de su función.

10-Autogobierno local: municipalización de servicios públicos y de ciertas industrias o comercios (tranvías, teléfonos, alumbrado, baños, lavaderos, fuerza motriz, tahonas, carnicerías, hielo, etc.).

11-«Renovación del liberalismo abstracto y legalista imperante, que ha mirado no más a crear y garantizar las libertades públicas con el instrumento ilusorio de la Gaceta... sustituyéndolo por un neoliberalismo orgánico, ético y sustantivo, que atienda a crear y alianzar dichas libertades con actos personales de los gobernantes principalmente, dirigidos a reprimir con mano de hierro y sin tregua a caciques y oligarcas».

Huesca56

   Costa fue profeta en su tierra

(Castillo de Loarre, los Mallos de Riglos, San Juan de la Peña, Monasterio de la Serós y Jaca)

Castillo de Loarre

 Huesca57

El castillo abadía de Loarre (en aragonés castiello de Lobarre) es un castillo románico situado en la localidad del mismo nombre, en la sierra de Loarre.

Desde su posición se tiene un control sobre toda la llanura de la Hoya de Huesca y en particular sobre Bolea, principal plaza musulmana de la zona y que controlaba las ricas tierras agrícolas de la llanura. Fue construido en el siglo XI y presenta un buen estado de conservación, lo que hace que sea uno de los mejores ejemplos de arquitectura militar y civil del románico de España.

El castillo se asienta sobre un promontorio de roca caliza que utiliza como cimientos. Esto suponía una gran ventaja defensiva, ya que así los muros no podían ser minados (técnica habitual en el asedio de fortalezas, que consistía en construir un túnel por debajo del muro para después hundirlo y abrir así una brecha por la que asaltar).

El castillo está en bastante buen estado de conservación (salvo la parte del antiguo castillo de Sancho III de Navarra, mucho más deteriorada) y está considerado como la fortaleza románica mejor conservada de Europa. Destacan la pequeña capilla, la cripta de santa Quiteria, situada a la entrada (con una increíble acústica) y la majestuosa iglesia del castillo (de la que se desconoce el paradero de las pinturas románicas) en la que llama la atención la cúpula (por lo poco habitual que es en el románico).

 Huesca58

La ubicación de la construcción es un aspecto fundamental para entender su carácter militar. Está situado a la entrada de los Pirineos, justo cuando las montañas dan lugar a la llanura, dominando toda la comarca. La gran llanura que forma "La Hoya" se extiende hasta las orillas del Ebro, hasta Zaragoza.

Historia

El hallazgo de monedas romanas en el solar del castillo da pie a pensar que este se construyó sobre el asentamiento romano de "Calagurris Fibularia".

El castillo fue construido en el siglo XI por orden del rey Sancho III, para servir como avanzadilla fronteriza, desde la que organizaron los ataques contra la localidad de Bolea, situada en la llanura que domina la construcción. De esta época datan el edificio real, la capilla, el torreón de la Reina, el patio de armas, las estancias militares y de servicio y la torre del homenaje (antigua torre albarrana).

Posteriormente, hacia 1071, durante el reinado de Sancho Ramírez se realiza un ampliación que le da la forma que mantiene en la actualidad. De esta época son las demás construcciones incluida la iglesia. El recinto amurallado se construye en 1287.

Tras la ampliación se funda un monasterio de canónicas de San Agustín. Pedro I de Aragón, hijo de Sancho Ramírez, cambia la cabeza de la congregación a Montearagón, con lo que Loarre pierde el carácter monasterial. El desalojo de los musulmanes de la comarca de La Hoya, hace que el castillo pierda su carácter militar. Perdiendo relevancia e influencia.

En el siglo XV, la población que vivía a los pies del castillo se traslada a la actual villa de Loarre, reutilizando materiales de la fortaleza.

Huesca59 

El Castillo de Loarre fue protagonista del rodaje de la película El reino de los cielos (Kingdom of Heaven) (2005) del director Ridley Scott, protagonizada entre otros por Orlando Bloom, Eva Green, Liam Neeson y Jeremy Irons. El pueblo de Loarre participó en el rodaje de la película haciendo de extra. El castillo puede verse en varias ocasiones durante la película.

También fue el escenario de la película Miguel y William (2006), con Elena Anaya, Juan Luis Galiardo, Geraldine Chaplin, Malena Alterio y Josep María Pou.

Huesca60 

Los mallos de riglos

Huesca61

Los Mallos de Riglos son unas formaciones geológicas de tipo mallo, derivación desde el latín malleus («mazo»), situadas en la localidad de Riglos, en la provincia de Huesca (España), unos 45 km al noroeste de Huesca capital, en las sierras del Prepirineo oscense. Alcanzan los 275 metros de altura máxima (espolón norte del Pisón) y se caracterizan por sus grandes paredes verticales o incluso desplomadas, muy apreciadas para la práctica de la escalada

Los Mallos de Riglos son consecuencia de la elevación de los Pirineos durante la orogenia alpina y están formados principalmente de conglomerados del Mioceno, sedimentos con cantos rodados de tamaño significativo cementados por grava y arena.

Al crearse la cordillera pirenaica, la erosión provocó que gran cantidad de material fuera arrastrado hacia el sur por cauces que vertían sus aguas a la antigua depresión del Ebro, depositándose y sedimentándose en enormes conos de deyección. Estos depósitos aluviales fueron elevados por plegamientos de las capas inferiores y posteriormente erosionados, dando lugar a estas impresionantes paredes. La meteorización, sobre todo la de tipo fluvial, abrió profundas barranqueras ensanchándose las fisuras y formándose las características chimeneas. Los estrechamientos y techos que aparecen en ellas son debidos a que la roca más dura ha persisitido a pesar de la erosión de las aguas fluviales.

Cada mallo tiene un nombre propio, cuyo origen procede en algunos casos del nombre de algunas casas de Riglos (Firé y Pisón), de su forma o color característico (el Puro, el Cuchillo, la Visera, del Agua, os Fils, Colorado, Magdalena, Aguja Roja, Tornillo, Tornillito) o en homenaje a otras personas no relacionadas necesariamente con el mundo de la escalada.

Huesca62 

Respecto a la toponimia de los mallos pequeños hay que destacar que Julio Soler Santaló en un artículo para el boletín de 1911 del Centre Excursionista de Catalunya recoge el topónimo "los Galochos".

Leyenda del hombre choto de Riglos

– Cuentan en Riglos, que el personaje de esta historia, era hijo de una pastora y de un buco (macho cabrío). Vivió hace muchos años, en compañía de su madre y de la soledad. Junto a su rebaño. La vida salvaje, y la fortaleza física que mostraba, hicieron que fuese tan temido como asustadizo. Su apariencia caprina, su cuerpo con una abundancia de pelo inusual y unas dotes de agilidad poco comunes, hicieron que se ganase el apodo de Hombre Choto.

Conocía de vista a muchas mujeres, pero nunca había cruzado ni una sola palabra con ninguna. Es más, lo apedreaban, le insultaban o se reían de él y de su aspecto.

Un día vio una a la que jamás antes había visto. Era diferente. No era una pastora como su madre ni como las otras que conocía. Vestía diferente, su piel era más blanca y fina, y hasta olía diferente. La siguió durante algunos días a escondidas mientras paseaba.

Cuando ella se paraba, el se acercaba hasta que podía sentir su olor con toda intensidad. Después regresaba hasta su casa embriagado por aquel aroma que ya no podía olvidar. Como es natural ella también se percató de su presencia por el olor que desprendía. Y al final, surgió una sincera amistad.

El Hombre Choto hablaba con ella de todo lo que jamás había hablado con ninguna otra persona. Se encontraba a gusto con ella. Y hasta se llegó a enamorar más de lo que imaginaba.

Huesca63 

Ella, estaba allí por una enfermedad que sufría. Sentía mucha lástima por su amigo. Él le ayudó con su conocimiento de todas las plantas hasta que sanó totalmente, momento en el que ella desapareció.

El sentía amor, y ella solo lástima, lo que condujo al Choto a la desesperación y a la locura. La buscaba por todos los sitios que conocía. La buscó día y noche.
Llegó a tal estado de locura, que una noche sin Luna se arrojó desde lo mas alto de los Mallos.

Y dicen los que pasean cerca de estas rocas en las noches oscuras de primavera que todavía se le oye llamándola y arreando a su rebaño.

Santa Cruz de la Serós

Huesca64 

Santa Cruz de la Serós (en aragonés Santa Cruz d'as Serors 'santa cruz de las sorores')

En pleno corazón del Alto Aragón, la pequeña localidad de Santa Cruz de la Serós se ubica a escasos 15 kilómetros de la ciudad de Jaca, constituyéndose, como si de su antesala se tratase, en paso obligado para llegar al histórico Monasterio de San Juan de la Peña, germen del primitivo Reino de Aragón y, como no podía ser de otra forma tal y como veremos a continuación, de la propia población de Santa Cruz.

Pese a que en la actualidad Santa Cruz de la Serós, con sus apenas 200 habitantes, no deja de ser una más de las minúsculas poblaciones que jalonan las sierras pre pirenaicas, puede enorgullecerse de poseer una dilatadísima historia además de contar con dos monumentos románicos de primer orden: la iglesia (antiguo monasterio) de Santa María y la Iglesia de San Caprasio.

El propio topónimo "Serós", apócope de "Sorores" (hermanas), muestra bien a las claras la importancia que tuvo en el desarrollo de la localidad la comunidad monacal femenina que, como abordaremos en las próximas líneas, se

Pese a que la tradición, apoyándose en fuentes del todo imprecisas, ha venido señalando que el origen de Santa María de Santa Cruz de la Serós se remontaría a las últimas décadas del siglo X (992), en tiempos del monarca navarro Sancho Garcés II; recientes estudios han acabado por desmentir dicha teoría, retrasando la más que posible fundación de una primera comunidad monástica en la localidad hasta la primera mitad de la undécima centuria.

De este modo, parece probado que los orígenes verdaderos del Monasterio de Santa María de Santa Cruz de la Serós se remontarían hacia, aproximadamente, el año 1025 cuando, con motivo de la refundación e implantación de la orden benedictina en el vecino monasterio de San Juan de la Peña por Sancho III el Mayor, el cenobio pinatense, hasta entonces dúplice, pasase a ser morado exclusivamente por monjes, debiendo entonces trasladarse la rama femenina al actual Santa Cruz, donde sería erigida una primera iglesia de nave rectangular y testero recto cuya existencia ha podido ser atestiguada gracias a una campaña de excavaciones acometida en 1991.

Durante la segunda mitad del siglo XI el rey Ramiro I mandaría edificar una nueva iglesia dotada de todos sus equipamientos monásticos propios, ingresando en él como religiosa, en 1059, la menor de sus hijas: la Infanta Doña Urraca.

Sin embargo, el primer momento de esplendor de la comunidad femenina de Santa María de Santa Cruz de la Serós llegaría entre 1065 y 1070 cuando, tras enviudar del Conde Ermengol III de Urgell (fallecido según algunas crónicas en lucha contra los musulmanes en un lugar indeterminado entre Monzón y Barbastro), la Condesa Doña Sancha, también hija del rey Ramiro I, ingresa en la comunidad, siendo al poco tiempo nombrada abadesa.

Huesca65

 

San Juan de la Peña

Huesca66 

El monasterio de San Juan de la Peña (en aragonés Sant Chuan d'a Penya),  sitruado al suroeste de Jaca, fue el monasterio más importante de Aragón en la alta Edad Media. En su Panteón Real fueron enterrados un buen número de reyes de Aragón. Forma parte del camino aragonés del Camino de Santiago. Su enclave es extremadamente singular.

Historia y leyenda

Cuenta la leyenda, que un joven noble de nombre Voto (en algunas versiones, Oto), vino de caza por estos parajes cuando avistó un ciervo. El cazador corrió tras la presa, pero ésta era huidiza y al llegar al monte Pano, se despeñó por el precipicio. Milagrosamente su caballo se posó en tierra suavemente. Sano y salvo en el fondo del barranco, vio una pequeña cueva en la que descubrió una ermita dedicada a San Juan Bautista y, en el interior, halló el cadáver de un ermitaño llamado Juan de Atarés. Impresionado por el descubrimiento, fue a Zaragoza, vendió todos sus bienes y junto a su hermano Félix se retiró a la cueva, e iniciaron una vida eremítica.

Este sería el inicio del Monasterio del que escribía don Miguel de Unamuno:

...la boca de un mundo de peñascos espirituales revestidos de un bosque de leyenda, en el que los monjes benedictinos, medio ermitaños, medio guerreros, verían pasar el invierno, mientras pisoteaban la nieve jabalíes de carne y hueso, salidos de los bosques, osos, lobos y otros animales salvajes.

Se habitan estas montañas poco después de la invasión musulmana, al construir el castillo de Pano, destruido en el año 734. El origen legendario del Reino de Aragón también encuentra en el monasterio cueva de San Juan de la Peña su propia historia, cuando reunidos los guerreros cristianos junto a Voto y Félix deciden por aclamación nombrar a Garcí Ximénez su caudillo que les conducirá a la batalla por reconquistar tierras de Jaca y Aínsa, lugar éste donde se produjo el milagro de la cruz de fuego sobre la carrasca del Sobrarbe.

Reinando en Pamplona García Íñiguez y Galindo Aznarez I, conde de Aragón, comienzan a favorecer al Monasterio. El rey García Sánchez I concedió a los monjes derecho de jurisdicción, y sus sucesores hasta Sancho el Mayor, continuaron esta política de protección. Allí pasó sus primeros años San Íñigo. En el reinado de Sancho Ramírez de Aragón adquiere su mayor protagonismo llegando a ser panteón de los reyes de Aragón.

Huesca67 

Fueron devastadores los incendios de 1494 y 1675. A raíz del último de ellos, se construyó el Monasterio Nuevo. El Monasterio Antiguo fue declarado Monumento Nacional el 13 de julio de 1889 y el Monasterio Moderno el 9 de agosto de 1923. La restauración fue dirigida por el arquitecto modernista aragonés Ricardo Magdalena.

Probablemente existiera algún tipo de cenobio anterior al siglo XI, pero la construcción de mayor importancia empieza el año 1026 por iniciativa de Sancho el Mayor. En el año 1071 el rey Sancho Ramírez cede el conjunto existente a los monjes cluniacenses y favorece su reforma. En este momento se levanta el conjunto que hoy queda, en mayor o menor medida. La reforma benedictina de Cluny no podía obviar la construcción de un claustro que se finalizará ya entrado el siglo XII.

Capiteles del claustro

De finales del siglo XI son un conjunto de capiteles de influencia jaquesa del claustro con temas de animales fantásticos y algunos motivos geométricos y vegetales donde destacan los roleos. Un segundo grupo, formado por veinte capiteles, fue encargado en el último tercio del siglo XII al llamado maestro de San Juan de la Peña, autor anónimo, también conocido como Maestro de Agüero, probablemente para sustituir otro anterior. El pequeño recinto ofrecía un cerramiento diáfano en forma de arcadas separadas por columnas. Los arcos se veían rematados con cenefas con el típico taqueado jaqués.

El Maestro desarrolla un programa sobre escenas bíblicas donde aparecen entre otras el Anuncio a los pastores, la Natividad, la Anunciación, la Epifanía, el Bautismo y la Circuncisión de Jesús, la Última Cena, episodios sobre Caín y Abel, la Creación de Adán y Eva, así como su Reprobación y posterior condena al trabajo. Seguramente el maestro de Agüero sólo elaboró los capiteles para dos alas del claustro ya que a finales del siglo XII el monasterio entró en franca decadencia. El programa iconográfico que plantean los 26 capiteles que conservamos parece enfocar la Salvación a través de la Fe escogiendo los episodios más significativos para ello.

Huesca68 

Se trabaja con bajorrelieves casi todos dominados por un horror vacui muy acentuado que provoca contorsiones en algunas figuras que superan el propio marco sacando un brazo como en la escena de Jesús y los Apóstoles. Los gestos son exagerados, casi teatrales, acentuando los ojos y la boca, y confiriendo narratividad a las escenas. En cuanto a las formas, éstas se someten a esquemas geométricos que dominan desde la configuración del rostro o los pliegues de los paños, hasta los movimientos de caballos o de la misma agua que se vierte de un jarro a otro.

En el piso superior se encuentra el Panteón real. En él, durante cinco siglos se enterraron algunos de los monarcas de Aragón y de Navarra. Su aspecto actual data del siglo XVIII.

Alberga los restos de algunos monarcas navarros que reinaron en Aragón, de los primeros condes aragoneses y de los tres reyes que iniciaron de la dinastía Ramirense, Ramiro I, Sancho Ramírez, Pedro I, junto con sus esposas.

Considerado por la tradición como la cuna del Reino de Aragón, fue parada habitual del Camino de Santiago y lugar de leyendas, y entre ellas destaca la que vincula este lugar con el Santo Grial (como a tantos otros).


Una fecha significativa fue la del 22 de marzo de 1071, cuando el Monasterio de San Juan de la Peña fue el escenario de la introducción, por primera vez en la Península Ibérica, del rito litúrgico romano, seguido en toda la Iglesia de Occidente, que ponía fin al antiguo rito hispano-visigótico y suponía la acomodación definitiva de la iglesia aragonesa a las pautas marcadas por el Pontificado.

Huesca69

Sin embargo, a partir de la segunda mitad del siglo XII se inició una cierta decadencia que se acentuó en el periodo siguiente. Fueron las características de esta época el final de las donaciones, las pérdidas patrimoniales, los múltiples, y especialmente con los obispados donde estaban ubicadas sus propiedades (Jaca-Huesca, Pamplona y Zaragoza), las deudas, el deterioro de las construcciones y diversos incendios que resultaron devastadores.

Jaca

Huesca70 

Jaca (Chaca o Xaca en aragonés), capital de la comarca de La Jacetania.

Historia

Edad Antigua: Iaca o Iacca (nombre antiguo de Jaca) era la capital de los iacetanos, citados por el historiador griego Estrabón (siglo I) como un pueblo que se extendía desde las estribaciones del Pirineo hasta las llanuras, llegando hasta la región de los ilergetes alrededor de Ilerda (Lérida) y Osca (Huesca).

Poco se sabe de su límite occidental, pero se ha sugerido que pudo estar en Navardún, término céltico que aludiría al antiguo nombre de unos extintos navarri sobre los cuales surgió luego el topónimo Navarra.

 Los iacetanos (Iakketanoi, en griego) eran parientes de los aquitanos (Akkitanoi), siendo ambos pueblos parecidos. De acuerdo a Estrabón, hubo entre los iacetanos reminiscencias de usos matrilineales, predominio del pastoreo, agricultura complementaria (acaso a cargo de las mujeres) y actividades guerreras como solución habitual a los problemas económicos.

Iaca acuñó moneda autónoma con alfabeto ibérico y se piensa que controlaba la actual Jacetania y la Canal de Berdún. Excavaciones arqueológicas dentro del casco urbano han descubierto en el nivel más profundo fragmentos de cerámica fabricada a torno con «técnica ibérica», así como cerámica campaniense de tipo A. Dicho material, fechado en el siglo II a.C., supone la aparición de los primeros indicios arqueológicos que se pueden relacionar con la población indígena de Iaca.

Existe una hipótesis alternativa, menos plausible, postulada en el siglo XVI por el cronista imperial Florián de Ocampo —y que decía haber explicado Alonso de Nebrija—, que afirma que Jaca fue fundada por el capitán griego Dionisio Baco —de sobrenombre Yaco— en el año 1325 a. C.

En el año 195 a. C., el cónsul romano Marco Poncio Catón inició la conquista de la ciudad que terminó en la primavera de 194 a. C. A fines del siglo III a. C. y comienzos del II a.C., los iacetanos habían efectuado numerosas expediciones de rapiña sobre los suessetanos afincados en las llanuras centrales de Aragón y parece ser que, en general, lo habían hecho impunemente.

Huesca71 

Marco Porcio Catón, quien conquistó Iaca en 194 a.C..

Conociendo la enemistad entre iacetanos y suessetanos, Catón situó a estos últimos delante de la escasa caballería romana ante las puertas de Iaca, provocando la salida de los montañeses, acostumbrados a vencer siempre a sus vecinos; una vez quedó desguarnecida la ciudad, ésta fue conquistada por el cónsul.

Edad Media: En las montañas del Pirineo se conservaron territorios cristianos tras la invasión de los árabes debido al protectorado carolingio establecido por Carlomagno en la llamada Marca Hispánica.

Uno de esos condados fue el núcleo del reino de Aragón. Hacia 920, establecido el condado independiente de los francos, Galindo II Aznárez repobló antiguas poblaciones de la cuenca del río Aragón, a lo largo de la cual se articulaba el condado, entre las que se encontraba Jaca, que entonces era una fortaleza habitada por unos pocos pobladores, una aldea con actividad meramente agropecuaria.

Huesca72 

Jaca era a comienzos del siglo XI un castro (o campamento militar fortificado) a cuyo entorno había surgido un conjunto exiguo de viviendas, pero que iría cobrando cada vez mayor importancia por su situación al pie del paso de Somport (uno de los más accesibles para acceder a Francia desde la Edad Antigua) y por su situación estratégica en el Camino de Santiago.

Ramiro I de Aragón estableció en Jaca una residencia regia, posiblemente en el castro fortificado, y situó cerca del monasterio de San Pedro la sede del obispo de Aragón, denominado así hasta que en 1077 Sancho Ramírez dotara a Jaca de su fuero e iniciara, hacia 1082, la construcción de la sede catedralicia.

Así, en 1063 se celebró en la localidad el Concilio de Jaca. El historiador Jerónimo Zurita, en sus Anales de la Corona de Aragón, refiere que Ramiro I «porque había diversos abusos en el estado eclesiástico y por descuido de los reyes pasados duraban grandes corruptelas contra lo establecido por los sagrados concilios generales que hubo en la primitiva Iglesia, procuró que se congregase en la ciudad de Jaca concilio provincial».

También señala que este monarca fue el primero de los reyes de España en restaurar los «cánones», que no debieron ser otros que los establecidos por el Concilio de Roma de 1059 referidos a la vida canónica y al celibato de los clérigos. Otro de los resultados de este concilio fue restablecer la diócesis de Huesca (suprimida durante el dominio musulmán), quedando la sede provisional en Jaca en tanto no se reconquistara Huesca.

Pero el definitivo impulso a Jaca se lo dio Sancho Ramírez en 1077 cuando, por lo dispuesto en el mencionado fuero, pionero entre los territorios cristianos y difundido posteriormente en otras ciudades de Navarra o Cuenca, convirtió a la villa en ciudad, la dotó de sede episcopal, en cuya catedral se asentaría el ahora obispo de Jaca, y le dio el estatus que la hacen ser considerada la primera capital del reino entre 1077 y 1096 en que, conquistada Huesca, sucedería en el obispado y capitalidad.

Huesca73 

Asimismo, edificó Sancho Ramírez un nuevo palacio real en el barrio de Santiago, y unificaría los tres núcleos iniciales (castro fortificado, monasterio de San Pedro y burgo de Santiago) en una sola entidad poblacional unida por dos calles cruzadas, al modo del cardo y decúmano romanos, y las viviendas de todos aquellos hombres francos que quisieran acogerse a los nuevos privilegios que se decretaron para los habitantes de Jaca.

Edad Moderna: Las pestes y los incendios de finales de la Edad Media hundieron a Jaca en una profunda crisis de la que no saldría hasta la intervención de Fernando el Católico para formar un gobierno local. La burguesía se vio favorecida por esta situación y muchos se convirtieron en mecenas de artistas cuyo resultado se puede apreciar especialmente en la catedral.

La situación fronteriza de Jaca se fue determinando a medida que se consolidaban los límites territoriales de los reinos europeos y los Pirineos se erigían como eficaz frontera natural. La ciudad se consolidó como plaza militar desde la que defender los reinos peninsulares de una hipotética invasión francesa. A este respecto, Felipe II ordenó la construcción de varias fortalezas a lo largo de todo el Pirineo. En 1592 este monarca ordenó la construcción de una fortaleza en los campos que habían configurado el Burgo Nuevo.

Huesca74 

El barrio levantado extramuros de la ciudad. Así, se levantó una soberbia fortaleza pentagonal diseñada por el ingeniero italiano Tiburcio Spanochhi, la Ciudadela de Jaca, para dar respuesta a un ejército provisto de artillería.

La epidemia de peste que asoló el levante peninsular a mediados del siglo XVII (cuyos primeros brotes surgieron en Valencia en 1647) ocasionó una mortandad entre la población de Jaca del 42%.

En la Guerra de Sucesión, Jaca se puso del lado de los Borbones. Por ello, en 1707 fue asediada por aliados del Archiduque Carlos y socorrida por el marqués de Salutcio a cuya vista se retiraron a un bosque, donde fueron atacados por el marqués de Santa Coloma, quien les mató mucha gente e hizo numerosos prisioneros. El rey Felipe V gratificó a la ciudad de Jaca con los títulos de «muy noble, muy leal, y muy vencedora», añadiendo la flor de lis al escudo de sus armas que ostentaba la Cruz de Sobrarbe.

Huesca75 

Edad Contemporánea: A finales del siglo XVIII, Jaca jugó un papel importante en la Guerra del Rosellón, al ser uno de los objetivos de los revolucionarios franceses por su situación estratégica. En la Guerra de la Independencia, la ciudad se rindió a los franceses el 21 de marzo de 1809.

En el marco de las Guerras Carlistas, fueron denunciados en 1839 varios soldados de la guarnición de Jaca por vender armas a los revolucionarios.

La Revolución Gloriosa de 1868 trajo consigo el nacimiento de la Junta revolucionaria de Jaca, enfrentada a la de Huesca, que tomó una serie de medidas tales como la supresión del Seminario o la creación de los Voluntarios de la Libertad, completadas en el sexenio revolucionario con la construcción de la carretera de Jaca a Francia.

Jaca experimentó a principios del siglo XX un despertar urbanístico y demográfico, motivado en buena medida por el derribo de su muralla medieval, que se inició en 1908. En 1928 llegó el ferrocarril a Canfranc, a cuya inauguración asistió el monarca Alfonso XIII. En ese mismo año también se creó la Universaidad de Verano.

El 12 de diciembre de 1930 tuvo lugar el episodio de la Sublevación de Jaca, pronunciamiento militar contra la monarquía de Alfonso XIII durante la «dictablanda» del general Berenguer. Se inició con la proclamación de la República desde los balcones del ayuntamiento jaqués y el nombramiento de la primera alcaldía republicana. Al mismo tiempo se organizaron dos columnas dirigidas por el capitán Fermín Galán y Salvador Sediles que partieron hacia Huesca.

Huesca76 

Fermín Galán, protagonista de la Sublevación de Jaca.

La sublevación fue sofocada en la madrugada del día siguiente y el 14 de diciembre fueron fusilados los capitanes Galán y García Hernández, mientras que el capitán Sediles, también condenado a muerte, fue indultado ante las movilizaciones populares. Sin embargo, los efectos de esta sublevación se dejaron sentir en la proclamación de la Segunda República Española cuatro meses después; tras las elecciones del 12 de abril, la monarquía se exilió y se proclamó la República, que les reconoció como "mártires".

Catedral de San Pedro de Jaca

La Catedral de Jaca es uno de los templos más importantes del primer románico español, construida a partir de 1077 por orden del rey Sancho Ramírez. Conserva su estructura básica y configuración románica, con una planta basilical de tres naves de cinco tramos con sus correspondientes ábsides alineados, dos puertas de acceso y una esbelta cúpula.

A los pies del templo se sitúa un pórtico, de aire primitivo y abovedado en cañón, en el que se abre la portada principal, de elegante estructura, y con un tímpano que encierra un crismón.

Huesca77 

La catedral alberga en su interior el Museo Diocesano de Arte Románico, inaugurado en 1970.

En él se expone un gran fresco, calificado a veces como «la Capilla Sixtina del Románico», que resume el catecismo en imágenes, desde la creación de Adán hasta la Ascensión de Cristo. Por su belleza y expresividad, ha sido considerado uno de los mayores conjuntos de pintura románica que se han conservado.

Ciudadela de Jaca

La Ciudadela de Jaca, llamada hasta el siglo XIX «Castillo de San Pedro», es una construcción mandada edificar por Felipe II a finales de 1592 tras los graves desórdenes acaecidos con la huida de Antonio Pérez.

Presenta una planta pentagonal con baluartes en forma de flecha en todos sus ángulos, comunicados por un camino de ronda. Es la única fortaleza de esta tipología, desarrollada en el siglo XVI, que se conserva íntegra en el mundo. Mantiene todos los elementos que configuran el modelo de ciudadela: un conjunto defendido por muralla, glacis y foso, un área de residencia y edificios de servicios.

Huesca78

En su interior se conserva una pequeña iglesia del siglo XVII dedicada a San Pedro, con una interesante portada barroca y una pila bautismal románica del siglo XI.

Tras este paseo por el arte, la historia, el paisaje y el paisanaje de esta Huesca Medieval, tan solo nos queda esperar con impaciencia un nuevo periplo por los Valles Pirenaicos de Huesca para apreciar también la flora, fauna y toda la biodiversidad que contiene. Muchas gracias y feliz lectura.